Los Espectros son seres fantasmales que aparecen como enemigos en toda la saga God of War. Consumidos por la rabia en la que murieron, los Espectros atacan a cualquier ser viviente que se les acerque.
Su aspecto es el de demacrados seres humanos, sin ojos, con carne en descomposición y en algunas ocasiones afiladas hojas en lugar de brazos. No tienen piernas, su cintura termina debajo de unas telas que emanan una especie de humo o de fuego que les permite levitar sin tocar la superficie. Pueden esconderse debajo de la tierra, siendo invulnerables a los ataques, hasta que finalmente salen de nuevo a la superficie por debajo de los pies de Kratos para atacarle.
Mitología[]
En la saga God of War[]
En los dos primeros juegos, Kratos los acaba apoderándose de uno de sus brazos, los echa al suelo, les arranca el brazo, y luego los decapita con el brazo de espada.